Caos y Orden

Ilustración por: Mariana Zamudio
Él.
Una oquedad insondable,
oscura, sin rastro,
compleja e imprevisible.
Ella.
Un ser somero,
claro, determinado,
sencillo y comprensible.
Incompatibles.
A primera vista, inestables.
No se encontraban en armonía.
Eran una perfecta discordia.
Él.
Algo intermitente.
Parecía bailar en un universo aleatorio,
visible pero misterioso.
Ella.
Puntual y sistemática.
En una constante búsqueda insaciable
de mantener todo bajo control.
Diferentes.
Eran día y noche.
Un silencio ensordecedor,
donde se negaban mutuamente.
Se necesitaban.
No lo sabían.
Creían que la posibilidad de estar juntos
solo pertenecía a un mundo quimérico.
Él, caos.
Ella, orden.
No tener nada en común
era la única conexión de su dependencia.